Para conmemorar los seis meses de la desaparición forzada de los 43 normalistas de Ayotzinapa, Lozano-Hemmer reprogramó un sistema de reconocimiento facial —normalmente utilizado para localizar sospechosos— para buscar a los desaparecidos. Una vez que una persona es captada por una cámara, el sistema busca coincidencias biométricas con las caras de los estudiantes y selecciona al que comparta más rasgos para después determinar un porcentaje de certidumbre en su hallazgo. La experiencia cuestiona tanto nuestra condición de sujetos de nuevas tecnologías de control como nuestra relación ética y personal con las víctimas de la violencia estatal.


RAFAEL LOZANO-HEMMER (1967)
Nivel de confianza, 2015
Algoritmo de reconocimiento facial, computadora, pantalla y cámara web
En proceso de donación del artista, 2020