Carlos Bunga
Khôra
Carlos Bunga parte de una serie de reglas que le permiten generar espacios tanto reales como mentales, en los que la dimensión conceptual y objetual se entrecruzan. Sus instalaciones efímeras son generadas a partir de la confrontación directa con el espacio.
Hay Khôra, pero la Khôra no existe.
Jacques Derrida, Kôra.
Bunga trabaja sin plan previo, ni diseños, usando la sala de exhibición como un laboratorio de experimentación. La obra, que es siempre un resultado abierto no terminado, germina dentro de un juego de ocupación en donde Bunga se dispone tanto a hacer como recibir del lugar que interviene.
Khôra reflexiona precisamente sobre la relación entre dar lugar y recibir: sobre un espacio que recibe sin apropiación, y un receptáculo que no se reduce a lo que recibe. Al tomar ese concepto misterioso de la obra de Platón, Bunga se permite plantear un movimiento rebelde al imperativo de inteligibilidad de la civilización occidental. Khôra es el nombre propio de una puesta en abismo, de una hendidura surgida en el seno mismo de la filosofía.
En el Timeo de Platón, este término desafía el principio de la no contradicción que, como se sabe, plantea que una proposición y su negación no pueden ser ambas verdaderas al mismo tiempo. Como dice el filósofo Jacques Derrida, Khôra parece ser ni esto ni aquello y otras veces a la vez esto y aquello. Es un dar lugar que es una oscilación constante entre la exclusión y la participación.
Se trata de un abismo por exceso, por dislocación, por posibilidad; porta-impronta de propiedades esquivas, anacrónicas y escurridizas cuya única singularidad es la capacidad de siempre escapar a la determinación. No tiene forma, no es sensible, no es inteligible; bajo las premisas del paradigma filosófico no existe, aunque lo ha acompañado desde el inicio. Nombrarla en este ejercicio, no es una contraposición ya que Khôra no se ofrece para una lógica binaria, pero sí convoca dentro del espacio racional del museo a otras formas de recibir y de ser recibido. Abrirse a ellas demanda prescindir de cualquier soporte de categorización o de inteligibilidad y asomarse al abismo sin red de seguridad.
Este proyecto forma parte de Sexta Sur, un nuevo programa curatorial que integra cuatro exposiciones individuales al año de artistas emergentes, nacionales y extranjeros, con el fin de generar un espacio de alternancia y experimentación que permita el flujo de intervenciones divergentes y espontáneas que se integren a un verdadero diálogo.
Artista: Carlos Bunga (Portugal, 1976)
Co-producción con el Museo Amparo de Puebla
Publicación
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Carlos Bunga
Autores : Cecilia Delgado Masse, Alejandra Labastida
Idioma : Español
Editores: MUAC-UNAM
Precio: $150 en tienda
